domingo, 17 de enero de 2010

Sustancias de amantes

Espalda nocturna, éste es nuestro tiempo


I

Darte una caricia que sea inevitable. Tenderte en el silencio perfecto, encima de tijeras, lápices y algún cenicero boca abajo.

Escucharte mientras la almohada toma tibieza, mientras dibujo una hoguera en tu costado, mientras el mundo se acaba.


II

En esta callecita no existe el caminar apurado. Porque a pesar de que cada noche trae un vuelco en el corazón, un despiste tuyo, otra pasión mía

Cada nuevo beso, vale más que el último.


III

Todavía nos queda llevar una vela de paseo, alucinar en ciudades húmedas, flotar en el escenario oscuro de la muerte.

Dentro de esta lucha de las cuatro estaciones

Te pido que no me perdones nunca la necesidad que tengo
De que esto no termine.

2 comentarios:

Camila dijo...

la ultima frase de II y III <3

Juanjo dijo...

Jajaja, las más pussys Mililla